¿Pero entonces qué es una historieta? (U ¿Otra vez con lo mismo, pibe?)

Tiempo ha estuve divagando sobre la categoría historieta. No llegué a ninguna parte, como pasa cuando uno divaga olímpicamente por el simple hecho de divagar. Sin embargo hablé de la naturaleza elíptica de la historieta como un aspecto ontológico central. Hace un par de semanas leí por algún lugar que Berliac hablaba de que en la historieta de hoy no se «aprovecha el milagro de la elipsis». No me voy a jactar de la coincidencia porque yo no inventé el concepto de elipsis ni su importancia en la historieta, pero quiero volver sobre eso.

Se suele decir que la historieta es prima del cine (vástago de una rama caída en desgracia de una familia noble). Sospechemos que la condición de «primitud» se debe a que ambos medios/lenguajes se valen fundamentalmente del lenguaje visual para articular un mensaje sin dejar de depender en mayor o menor medida (aunque más no sea en su etapa de gestación del mensaje) del lenguaje verbal. El cine expande su materia en el tiempo, la historieta lo hace en el espacio. Esa diferencia es fundamental, porque lo que en el cine se cuenta a través de la sucesión, la historieta lo hace a través de la discontinuidad, dicotomía que, en nuestra sociedad tan proclive al cine, es vista como una desventaja (la desgracia de aquella familia noble).

Pero de la «desventaja» (aparente) la historieta genera una potencialidad: si no se puede tener continuidad, hay que explotar la discontinuidad. Por eso el término secuencia de Eisner es engañoso: viene del latín sequor (seguir) que no implica fluidez (de ahí que para Will juegue un papel tan importante la yuxtaposición). Con lo cual, cuando Eisner decía que la historieta es un arte de narración secuencial estaba implicando la elipsis (oculta en el centro mismo de la historieta).

¿Dónde quiero llegar? No sé muy bien. Simplemente se me había ocurrido que la historieta (no como objeto ni como categoría sino) como experiencia de lectura es un fenómeno derivado de la elípsis: sóla, una página que tiene seis cuadros con algún orden y con una serie de palabras que tienen cierto sentido no es una historieta, pero pasa a serlo en el momento en que un lector está allí para operar sobre las elípsis. (¿Es acaso un razonamiento del tipo «si un arbol se cae en un bosque y no hay nadie para escucharlo ¿existe el árbol?»? No me importa…).

Por lo tanto (y llego a lo que quería escribir), la historieta está en eso que falta: no en un lector que viene y va, sino en una experiencia de lectura comprometida, activa, que (se) juega (en) el juego de la elípsis porque conoce las reglas y cómo romperlas.

El problema es que la elípsis es un artificio narrativo y ¿qué hacemos con la elípsis cuando en una historieta no se narra? Eso prefiero dejarlo para otra…

Publicado el marzo 25, 2010 en Reflexiones que parecen importantes. Añade a favoritos el enlace permanente. 8 comentarios.

  1. Qué buen artículo. No estoy de acuerdo por diversas razones bizantinas, pero muy bueno. Me parece que, como diría el verdadero Jerusalem, siento en las bolas cómo nace una columna para Hablando del Asunto, je.
    Me parece que la idea de la historieta como elipsis es, también, una herencia del cine. Si supongo que falta algo entre las viñetas, es porque supongo una continuidad ideal de la que sustraje elementos. La viñeta como fotograma.

    La elipsis como figura aparece, y mucho, claro. Pero no sé si es fundante. Cierto que siempre se pueden multiplicar pasos entre una viñeta y otra pero lo mismo podríamos decir de la literatura. En el «veni, vidi, vici» de Julio César, ¿tiene sentido decir que César elidió los pasos intermedios? Toda narración estaría basada en la elipsis, y dejaría de ser el principio específico de la historieta.

    Ahora: ¿los ángeles tienen sexo?

    Abrazo!

    Fede

    Me gusta

    • spiderjerusalem85

      La objeción me parece atinada: la elipsis como artificio narrativo no es exclusivo de la historieta (aunque creo que sería aceptable decir que la elipsis es el principio constructivo de la historieta y no del cine o de la literatura). Sin embargo, releo el texto y me parece encontrar una oscilación que me perturba: creo haber usado la palabra elipsis para dos cosas relativamente disímiles; por un lado la elípsis como artificio narrativo, por el otro la elipsis en otro sentido más cognitivo o acaso metafísico (por lo que me resulta más inexplicable). Ese segundo sentido sólo me sale pensarlo en términos de ‘relevancia’: si hay dos viñetas juntas que, creo, me están diciendo algo, son relevantes entre sí y tengo que desandar un cierto camino de inferencias para (re)establecer su continuidad; si no tienen continuidad tengo que desandar otro camino de inferencias más largo para entender por qué están una al lado de la otra. Claro, ahora estoy hablando de continuidades, cosa que antes había dicho que era privativa del cine… Me estoy enredando…

      Me gusta

      • Sí, hay dos cosas! A mí me molesta siempre que se hable de elipsis a un nivel de granularidad tan pequeño. Cuando estudié cine, nos hablaban de elipsis *narrativa*; veo a Marty McFly despertar por una llamada del Doc y a continuación llegando en skate a la estación de servicio. Esa elipsis existe en cualquier medio que cuente ficción.

        La otra elipsis, la que mencionamos en historieta cuando investigamos la ligazón entre cuadros, me pregunto por qué no puede entrar dentro del concepto de «cerrado» de McCloud. Completo con mi mente todo lo que el cuadro no me muestra y completo también entre los cuadros. Esto me parece más análogo al montaje que me permite ver por un lado a Ross y por el otro a Chandler sin dejar de imaginarlos sentados frente a la misma mesa ratona.

        Me gusta

  2. Me quedé pensando en esa página que sólo es historieta cuando alguien viene y la mira. De lo primero que me acuerdo es de aquella discusión de hace unos meses sobre la página de Agrimbau/Ginevra y la pintura de Rockwell. Pero quería compartir un segundo recuerdo, algo que vi en un blog que ya no sé si era de historieta o no: el autor posteaba una serie de palabras sin sentido

    ngohiejkffkjbkm
    gkpo54321gh6
    fflpfo

    y a continuación una imagen de un montón de fichas de metal con letras grabadas (¿molduras de imprenta, supongo?). Y el autor se sorprendía de que las letras eran las mismas, pero cuando eran vistas en la imagen los ojos no se detenían a leerlas, no entraban como texto. El sentido recibido era «Un desorden de tipos de imprenta.» Los tres renglones de sinsentido tenían un tiempo de lectura mayor.
    El lector de historieta sería alguien que viene y lee los renglones en la imagen.

    Me gusta

    • spiderjerusalem85

      está bueno el ejemplo este que contás, San. para el lector de historietas, el sinsentido es el blanco entre viñetas. vaya uno a saber por qué, cuando ves el instructivo para enchufar un tele los «intersticios» no comunican: la relación de continuidad está solventada por el rigor de la sucesión numérica que acompaña a los pasos a seguir y no hay información que se evite dar, se dice todo lo que se tiene que decir y nada más (un instructivo para usar un jabón de ropa que hable de los avatares de la muerte y del hombre, como dice Dolina que escribió Manuel Mandeb, es cómico por inaudito). en historieta se espera algo más porque se acostumbra a la explotación de ese espacio pluripotencial de significaciones que es el gutter. tal vez si me hubiera valido del gutter como objeto para explicar lo que quiero decir acerca de la elipsis, hubiera sido más claro. o no… no sé… a lo que voy es: el gutter es blanco o es negro o de algún color, pero no vehiculiza ningún sentido. sin embargo creo que vamos a concordar que hay un uso específico del gutter orientado a la comunicación en la historieta. por ahí elegir la palabra elípsis fue encasillar el argumento que quería dar a lo narrativo cuando bien podría haberme valido de lo objetual condensado en el gutter… a esta altura ya me perdí…

      Me gusta

  3. Hola Bru.

    No sé si leiste esto:

    http://autorberliac.blogspot.com/2008/04/el-comic-abstracto-o-el-comic-como.html

    Lo escribí hace un tiempo largo, y tengo que revisarlo, pero me retrotraje a él cuando decís

    «sóla, una página que tiene seis cuadros con algún orden y con una serie de palabras que tienen cierto sentido no es una historieta, pero pasa a serlo en el momento en que un lector está allí para operar sobre las elípsis».

    Se puede discutir esa frase pracicamente palabra por palabra: a que llamariamos «pagina» (un dibujo o varios)?, a que llamariamos «orden» (secuencia en el espacio o en el tiempo), a que llamariamos palabra (texto u onomatopeyas), a que llamariamos «Sentido» (interpretatio, visual, conceptual), y por ultimo, el titulo de tu post, a que llamariamos historieta algo compuesto por todas las palabras qu acabo de mencionar)?.

    Qué suerte que la mayoría de los aspectos formales de la historieta me resultan hoy nada urgentes, porque son inacabables.

    Lamentablemente en la presentacion de Matufia no tuvimos ocasion ni para decir «como andás», pero me interesa aber tu opinión sobre unas cuantas cosas. Espero algún día un vaso de algo nos junte y charlemos largo y tendido. Si tenés ganas y tiempo, escribime a berliac@bibliopinta.com y arreglamos.

    Un saludo.

    Me gusta

    • spiderjerusalem85

      Hmm. Me siento en la obligación de rebatir tus objeciones por no sé qué instinto raro (alguna clase de instinto de preservación intelectual, supongo), pero estoy de acuerdo con vos salvo por una cosa. Estoy de acuerdo en cuanto a lo discutible de las categorías que usé: «página», «orden», «palabras», «sentido». Creo que las usé por puro instinto mío y por comodidad comunicativa (no me interesaba tensionarlas porque mi interrogación no iba hacia ellas). No así con la idea de «historieta», de la que creo estar planteando otra cosa distinta de las palabritas anteriores (lo que no creo es haberlo logrado porque todavía no alcanzo yo mismo a conceptualizar con claridad mi propia intuición): traté de referirme a la historieta más como evento que como objeto, a tratar de poner en foco a la elipsis como mecanismo (o al gutter como vacío significante: creo que es una mejor aproximación) de modo de cambiar la perspectiva (hacer énfasis en la contemplación de la que hablás en tu texto y no en una serie de elementos constitutivos elegida más o menos arbitrariamente). De todos modos esto sigue siendo oscuro para mí…

      Me gusta

  1. Pingback: Hablando del asunto» Blog Archive » Historietas, movimiento, jugueterías filosóficas

Deja un comentario